Transformar tu dormitorio en tu refugio para descansar

02.09.2021

Volvemos a la rutina y con ello, vuelve el estrés y las preocupaciones. De esta forma, es algo habitual y lógico que aumenten las dificultades para conciliar el sueño. Aunque lo más importante es atajar el problema que nos impide pegar ojo, hay pequeños cambios y rituales que puedes llevar a cabo en tu habitación y que seguro consiguen mejorar tu calidad del sueño.

Empieza por una obviedad necesaria, conseguir estar a oscuras. Hay que cuidar mucho este aspecto. Parece una tontería, pero hay que perseguir que la ventana esté bien cerrada, la persiana bajada, puertas bien selladas... Quitar el modo stand by de los aparatos eléctricos evitará que veas ese puntito rojo encendido toda la noche y unas cortinas tupidas ayudan mucho a regular la luz.

Si la luz es importante para dormir, el silencio también es básico. No hay nada más molesto que intentar dormir y no poder porque estás escuchando el ruido del tráfico o conversaciones de la terraza del bar de debajo de casa. Para absorber el sonido y tener unas mejores condiciones acústicas, los textiles son grandes aliados. Las alfombras mullidas evitarán que escuches lo que ocurre en el piso inferior y los cabeceros tapizados y las paredes enteladas, aislarán tu dormitorio con el mejor estilo.

Primordial que el cuarto esté ordenado, el caos altera el espíritu. Un dormitorio lleno de armonía invita a la calma y el relax. Busca colores tenues para decorar tu cuarto, calmados, sobrios... Y evita los excesos decorativos. Menos es más y te sentirás más zen para conciliar el sueño.

¡Y hasta aquí nuestras recomendaciones! Te animamos a visitar nuestra sección de espacios, en los que puedes encontrar inspiración con este estilo que se adapte a toda tu casa.